Cualquier persona suficientemente interesada en el juego; que en él encontró motivación para estudiar, trabajar, desarrollar su personalidad y su capacidad para enseñar; que cree en los valores éticos y culturales del deporte; que desea hacer cursos de entrenador, ir a coloquios y a torneos; que le libros, revistas periódicos; que siente cortas las veinticuatro horas del día; que piensa en baloncesto por la mañana, cuando está en la ducha, afeita su barba, desayuna, se desplaza al trabajo, cuando come, en los viajes, en el cine y en el club social; que, en un partido de campeonato, escribe jugadas y esquemas con un lápiz que ha pedido a alguien; que, en el restaurante, usa la toalla, las servilletas o cualquier cosa en la que pueda escribir una jugada; que se va a la cama con papel y lápiz en la mesa de cabecera para no perder las «iluminaciones» hechas durante los sueños o las crisis de sonambulismo y conseguir utilizarlas en el entrenamiento del día siguiente; cualquier persona que hace todo eso, que al día siguiente está con disposición para hacer lo mismo y que le gusta hacerlo – esa persona es Entrenador”
Clair Bee; The Science of Coaching, New York, 1945
* Retirado do trabalho de Doutoramento de José Salvador Soares (Universidade de Extremadura - Cáceres)
1 comentário:
Ainda que desfaça a barba, e não frequente um Clube Social...segundo este texto: SOU TREINADORA!
E eu que pensava que era doentio estar sempre a falar no mesmo, pensar no mesmo e pensar em tirar férias disto, e não conseguir...
Obrigada...
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